El buen gobierno, la transparencia y el acceso a la información pública deben guiar toda acción política. Sin embargo, el ayuntamiento de Reus, gobernado por Junts, ERC y Ara Reus, no lleva a la práctica estos principios y acciones.

Todos los concejales tenemos el deber de presentar propuestas en el pleno del Ayuntamiento para mejorar la situación de nuestra ciudad y de los habitantes de Reus porque reflejan el sentir de la sociedad. Y estas propuestas son reivindicaciones que los reusenses trasladan a los representantes políticos que hemos sido elegidos a través de las urnas para que se les de curso y se pongan en marcha.

En Ciutadans nos alegramos cada vez que presentamos propuestas y éstas se aprueban pero es desconcertante que muchas veces el Gobierno Municipal incluso habiendo votado a favor de la propuesta y habiendo sido aprobada decida no ejecutarla.

La ejecución de las propuestas es obligatoria para el Gobierno Municipal si se trata de materias que son de competencia directa del Pleno. Y remarco la palabra competencia directa porque ésas resultan de obligado cumplimiento. Es muy diferente a cuando el Gobierno Municipal vota a favor de propuestas que no son competencia directa del Pleno y después decide que aunque votó a favor va a hacer lo contrario, ya que al no ser una materia de competencia directa del Pleno no le vincula, aunque proceder de esa forma sea poco coherente y nada honesto.

El problema radica en que propuestas de la oposición que son competencia directa del Pleno son aprobadas y por lo tanto son obligatorias para el Gobierno Municipal, pero el Gobierno Municipal no siempre las asume y esto es un engaño por parte del Gobierno Municipal porque con esa forma de actuar demuestra y se constata que no respeta lo que él mismo vota a favor y también con esa actuación deja en evidencia que no respeta las necesidades de la sociedad al no ejecutar las propuestas en el tiempo. Cuando los grupos de la oposición presentamos propuestas que son aprobadas pero no son ejecutadas el Pleno se convierte en una mera cámara de registro de documentos.

Los vecinos necesitan que la transparencia en la información sea real y poder consultar en cualquier momento el estado de ejecución en el que se encuentra una propuesta aprobada por el Pleno de la Corporación. También necesitan que los responsables políticos que gobiernan expliquen por qué no ejecutan lo aprobado.

Se trata de avanzar hacia una cultura de la transparencia. Es un límite al poder público y un instrumento de control que posibilita una democracia real más participativa y un empoderamiento de los ciudadanos para que puedan conocer la realidad de las acciones políticas de su municipio.

Este Gobierno Municipal sigue aferrado a la tradición secular de opacidad en la gestión de los asuntos públicos, y esa opacidad constituye un grave déficit de la democracia. Esperamos que el Alcalde de Reus recapacite para que todos los reusenses puedan ganar en buen gobierno, información y transparencia.

Portavoz del Grupo Municipal Ciudadanos de Reus (Cs)

Débora García Cámara
Portavoz del Grupo Municipal Ciudadanos de Reus (Cs)