Este sábado volvimos a asistir en una ciudad de Cataluña a la ocupación de un espacio público perteneciente a toda la ciudadanía por una pequeñísima representación de parte de ella. En este caso fue en Reus. Aquí, la Assemblea Nacional Catalana (ANC) no se atrevió a plantar las cruces que plantaron en Tarragona para lamentar la defunción del sistema sanitario catalán a manos de los malvados españoles. Hubiera sido demasiado evidente la mentira y la manipulación.
Descartada, pues, la performance de las cruces, se decidieron esta vez por plantar un centenar de monigotes con los acostumbrados mensajes victimistas sobre “un estat que col·lapsa”. Mensajes como “Lligats de mans i peus no arribarem enlloc” o “Ni cadenes que ens facin esclaus ni murs que ens barrin el pas” moverían a la compasión y a imaginar a los pobres catalanes confinados en campos de concentración o en plantaciones de algodón, cargados de cadenas cual Kunta Kinte, si, al igual que sus autores y afines, el resto hubiéramos perdido el sentido de la realidad.
Como afortunadamente no es así y podemos ver por las calles de Reus a ciudadanos libres que van de compras, toman tranquilamente el vermut en la Plaza del Mercadal, o comen felizmente en sus restaurantes, los mensajes anteriores mueven a la risa o a la indignación.
Sobre el resto del discurso, sólo lamentar la xenofobia y el supremacismo que lo impregnan, la ridícula pretensión de que en Cataluña todos nuestros políticos son ángeles y en el resto de España todos demonios dispuestos a destruirnos. ¡Basta ya de cuentos que sólo se creen quienes los cuentan!
Unas 200 personas protagonizaron el happening. En una población de 100.000 personas, ¿debe el Ayuntamiento permitir la ocupación de su plaza más emblemática para lanzar mensajes de odio que falsifican la realidad?
Desde Ciutadans condenamos esta actitud complaciente con una entidad separatista privada que para nada representa a la mayoría de reusenses, como se ha venido demostrando en las últimas elecciones. Y pedimos al señor Alcalde que, igual que en los Plenos pide responsabilidad a los partidos de la oposición, reflexione sobre si es responsable permitir estas actuaciones para que unos cuantos suplanten la voluntad de todos.
Juan Carlos Sánchez
Portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Reus